En el ciclo productivo del cerdo ibérico tiene una gran importancia la época del año de parto de las cerdas, es decir, el momento del nacimiento de los lechones. Se suelen programar varias parideras al año y  dependiendo de la fecha de nacimiento de los lechones, el ganadero decidirá si el animal será destinado a un tipo de alimentación o a otra, es decir, si lo llevará a montanera o por el contrario lo destinará a pienso.

La decisión de un tipo de alimentación u otra, depende de dos factores:

– Factor económico: Es posible que se puede llevar una paridera a montanera, pero que por falta de liquidez no se pueda llevar a cabo.

– Factor edad: Hay que tener en cuenta que la normativa del jamón ibérico marca unas edades mínimas de sacrificio según el tipo de alimentación y que según en la época del año que nazcan los lechones, es posible que no se cumpla la edad mínima de sacrificio para poder llevarlos a montanera.

Podemos diferenciar cuatro épocas de parto en el ciclo productivo del cerdo ibérico :

– Partos a finales de diciembre o principios de enero: A estos lechones se les suele llamar «navideños» o «yerbizos», ya que su destete coincide con la llegada de la primavera y la abundante hierba.

– Partos en el mes de marzo: A los lechones que nacen en el mes de marzo se les suele llamar «marceños».

– Partos entre mayo y junio: A estos lechones se les suele llamar «agostones». Su destete es en el mes de agosto.

– Partos en el mes de septiembre: A estos lechones se les suele llamar «montaneros«. Su destete es en el mes de noviembre.

Los ganaderos tienen que diseñar un calendario de cubriciones de sus cerdas para que los partos coincidan con las fechas arriba indicadas, para poder asegurar un total de cuatro parideras a lo largo del año.

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