28/05/12

Los animales que conforman la cabaña ganadera de cerdo ibérico en Andalucía, que se alimentan exclusivamente en la dehesa– se ha visto reducida un 60 por cientoen los dos últimos años, con su correspondiente equivalencia en producción.

Según datos facilitados por la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias (Faeca), se ha pasado de 570.522 animales censados en 2009 a 214.716 en 2011 y es el descenso más acusado de todas las comunidades autónomas que cuentan con una cabaña ganadera de estas características.

Desde el Grupo de Trabajo de Porcino Ibérico de Faeca se ha indicado que estas cifras demuestran que la norma de calidad del ibérico -aprobada en 2007-, concebida para amparar la raza ibérica, garantizar la sostenibilidad del ecosistema de la dehesa y asegurar la transparencia al consumidor, «ha resultado del todo ineficaz».

Faeca ha reclamado una nueva norma que proteja «exclusivamente» al cerdo ibérico de producción extensiva y que obligue a diferenciar, a través del etiquetado, si los productos comercializados (jamón, paleta o caña de lomo) proceden de cerdos ibéricos o cruzados, alimentados a base de bellota o pienso, de modo que el consumidor cuente con todas las garantías a la hora de realizar su compra.

Se pretende evitar que se siga comercializando bajo la imagen de la dehesa, productos procedentes de animales de cebo (pienso) criados mediante sistemas intensivos, cuyos costes de alimentación y manejo presentan una gran diferencia y sin olvidar las peculiaridades organolépticas que distinguen a unos y otros.

Noticia extraída de: http://www.finanzas.com

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